Ingredientes para 4 personas
350
g de mejillones
300
g de gambas
1
bote de bechamel de 400 ml o bechamel casera
200
g de pimientos del piquillo
1
cebolla grande
2
dientes de ajos
1
pimiento verde
aceite
de oliva
sal
pimienta
negra
Elaboración:
Las
gambas y los mejillones se pueden comprar frescos o congelados, en
este caso los he comprado congelados. Al igual que la bechamel, se
puede hacer casera, pero la he comprado en un bote ya elaborada, como
iba a mezclarla con piquillo, éste daría su sabor.
Picamos
la cebolla, el pimiento y los dientes de ajos y los sofreímos en una
sartén con un chorreón de aceite de oliva. Cuando estén pochaditos
salpimentamos y echamos la carne de los mejillones y las gambas.
Dejamos a fuego lento unos 5 minutos. Reservamos.
Tomamos
la bechamel, la echamos en el vaso de la batidora y luego echamos los
piquillos escurridos y troceados. Salpimentamos y batimos muy bien.
Reservamos.
Vamos
precelantando el horno a 180º C.
Limpiamos
y pelamos las alcachofas, las cortamos en dos mitades y las ponemos
en una sartén con fuego medio fuerte. Lo suyo es ir pelando,
metiendo en sartén, pelando, sacando de la sartén la anterior y
poner la alcachofa que hemos pelado. Así no se nos pone negra.
Las
alcachofas fritas las ponemos en un plato con papel de cocina para
eliminar el exceso de aceite.
Tomamos
una fuente grande refractaría y ponemos la bechamel de piquillo en
el fondo, sobre ellas colocaremos las medias alcachofas, para
terminar echando por encima de éstas un poco de nuestro sofrito de
gambas y mejillones.
Lo
tenemos en el horno unos 10 minutos ya precalentado.
Emplatamos.
... y para terminar las SS
y una pizca de esencia de musa.
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